viernes, marzo 06, 2009

Family Portrait

Siempre tuve la impresión de que mi familia era demasiado normal, incluso aburrida, nunca tuvimos problemas graves, nunca tuvimos escándalos, madres solteras, divorcios (bueno si hay uno, pero nadie habla de él, de hecho para algunos es una separación temporal, separación de más de 10 años y de más de 1000 km). Por eso mismo muchas veces me han cuestionado el porqué mi lejanía, porque puedo pasar tanto tiempo sin verlos y casi sin extrañarlos, creo que algunos hasta me han tachado de ingrato y mal agradecido por andar buscando en otros lados el afecto que debería buscar en mi propia familia, ya que aún la tengo a toda completa.

Eso se aclaró el otro día después de hablar con mi hermana largo y tendido de muchas cosas, fue una llamada que me dejó pensando y que me ayudó a encontrarle respuesta a una pregunta que me había hecho muchas veces últimamente: Por qué nunca me había sentido en familia con mi propia familia?

Y no, no era como yo pensaba que por la lejanía física que hemos tenido desde que recuerdo; es por nuestra forma de ser, porque desde niño yo aprendí a ver, escuchar y callar, a ser un cofre de secretos y apariencias. Y si, cuando era niño escuchaba, veía muchas cosas que no entendía, que por mi edad no alcanzaba a comprender, cosas que en ocasiones me afectaban directamente y tenían que ver conmigo, cosas que me lastimaron y que nunca pude discutir porque en mi familia no había discusiones, cosas que se quedaron en mi subconsciente y que así, inconscientemente, hicieron que poco a poco yo también me fuera alejando y fuese pintando mi raya.

Cuando estuve en terapia, la Gaynor insistió hasta el cansancio que le hablara de mi familia, pero como yo pretendía que no era importante, que con eso no tenía problema, nunca lo hice. Y ahora que puedo enfrentarme a las verdades (al menos a algunas) por duras y crueles que puedan ser, tengo que aceptar que sí, en efecto, mi familia es un castillo de naipes, está sostenida en mentiras, en pretensiones, en apariencias, todos sabemos que le estamos haciendo ronda a un elefante blanco, pero ninguno de nosotros nos atrevemos a hablar de ello; todos desde la 1ª hasta el 8º tenemos nuestros secretos, llevamos una doble vida de la que no estamos dispuestos a hablar, la diferencia es que algunos de nosotros ya nos dimos cuenta de ello y estamos dispuestos a vivir en consecuencia, y hay otros que prefieren seguirse engañando y tratando de engañar a los demás.

Y todo estaría bien, y si no bien al menos igual que siempre, pero lo que me caga es que algunos hablen de nosotros, de nosotros los que ya abrimos los ojos, que traten de decirnos como llevar nuestra vida, que nos critiquen, que nos señalen con la punta del dedo, que quieran controlarnos, que quieran “enderezar” nuestras vidas, que nos cuestionen, que traten de ponernos en evidencia, que traten de chantajearnos con ese truco barato de “piensa en nuestros padres” y que ellos les sigan el juego, que nos los pongan de ejemplo. Por Dios, si ellos supieran que esos a los que nos ponen de ejemplo son los peores, si supieran la basura que guardan debajo de la alfombra, si supieran los fantasmas que ocultan en el clóset .

La verdad habría preferido las peleas, los gritos, las maldiciones, los malentendidos, cualquier cosa hubiera sido más sana que esta aparente familia modelo, porque me temo que cuando los pilares, o uno de los pilares, que nos sostienen ya no estén, este castillo se va a derrumbar y no habrá pegamento lo suficientemente fuerte que vuelva a unirlo y la distancia además de física será emocional, aunque quizá algunos, aunque sea los menos, tengamos la sabiduría suficiente para estrechar y reconstruir los lazos que nos debían mantener unidos desde el principio. Yo estoy dispuesto a hacer mi parte.

3 comentarios:

Are!! x) dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Are!! x) dijo...

cada familia tiene sus mitos, sus historias, y hasta sus secretos... y no es de sorprenderse... (:

Knar dijo...

De Acuerdo con Are X) la familia de mi papa es harto interesante asi como de novela jeje la de mi mama es mas discreta, pero todos tenemos algo que contar de la familia.

Abrazotes