Life goes on.

Estoy aprendiendo, me está costando trabajo controlar mi ansiedad y mi desesperación, pero estoy aprendiendo que a veces lo único que nos queda es esperar, darle tiempo al tiempo y dejar que sea él quien se encargue de poner las cosas en su lugar. Y si, las cosas poco a poco se están arreglando, se están resolviendo, están mejorando y confío en que pronto, en su momento, todo estará bien o al menos no tan mal.

El fin de semana me fui al DF, esta vez sólo me llevé a la beba y fue un viaje bastante relajado, bastante disfrutable. La suegra se fue el viernes, yo el sábado en la mañana y mi PP ese mismo día saliendo de trabajar. La fiesta estuvo bastante disfrutable, es lindo sentirse en familia, sentir esa confianza, esa pertenencia, a pesar de los problemas, de las dificultades, saber que hay algo que no cambia, que está ahí, que se puede disfrutar y eso son este tipo de reuniones, la convivencia, las sobremesas.

La semana pasada nos fuimos al Liverpool a surtirnos de discos y pelis, cosa que hace mucho no hacíamos, aprovechando lo que nos cargaron en el monedero por el regalo que le compramos a la suegra para el día de las madres. Así que ahora estoy fascinado con un disco, desde el día que lo compramos lo he escuchado a diario y cada día me gusta más de principio a fin, cosa que pocas veces pasa; está genial creo que incluso mejor que el primero y el primero es excelente; me gusta cada canción y que bueno que me esperé al Deluxe Edition para poder disfrutar del cover que hace de Breakfast en America de los Supertramp y del dueto con Laura Pausini, bastante recomendable.