jueves, septiembre 11, 2008

Casi todos sabemos querer…

Desde que recuerdo me ha encantado la lectura, dicen que es un hábito que se aprende en el hogar pero supongo que en mi caso el hábito viene de alguna vida pasada pues en mi casa nunca, nunca vi a mis papás con un libro en la mano (aparte de la biblia) y mis hermanos (con los que crecí) lo más que leían era el libro vaquero, el sensacional de traileros y el mil chistes o la vanidades, aunque no voy a negar que yo también los leía, pero iba más allá y leía todo lo que caía en mis manos cuentos, novelas, etc. y después de leer mujercitas nació en mi el deseo de conocer más de esos universos paralelos en los que se sucedían historias tan maravillosas; pero a que iba?…ah si! que esa curiosidad me llevó a leer todo tipo de cosas acerca de todo tipo de cosas, cosas que no había vivido y que quería saber como se sentían, una de ellas el amor.
Leí que el amor y el enamoramiento eran cosas muy diferentes, que el segundo se acaba pero el primero permanece, que en muchas ocasiones el segundo no evoluciona al primero y que se sienten totalmente diferentes; lo tenía claro pero nunca lo había vivido.

A mis 16 me enamoré (supongo) de alguien cercano, alguien que cambió mi vida aunque nunca me correspondió y no fue, creo yo, más que una ilusión que necesitaba para llenar el vació existente en mi vida en ese momento. Pero se sintió bonito, las mariposas en el estómago, el sudor de las manos, el idealizar a la persona, el creer que nunca sentiría algo así de nuevo y que nunca lo superaría, claro que lo superé y claro que lo volví a sentir recientemente.
Pero esta vez fue diferente, fue mejor porque esta vez si fue correspondido y eso le añadió otras cosas, la incertidumbre acerca del futuro, la angustia al pensar que quizá se acabaría, las dudas, los nervios, la sensación de que si se terminaba el mundo se desmoronaría a mis pies, el querer estar todo el tiempo a su lado y el enojo porque no siempre podía ser así, la pregunta (injustificada) de si era correspondido, la pregunta (inútil) de quien quería más a quien.

Cuando todo empezó pensaba que eso nunca se iba a acabar, que iba a estar enamorado para siempre, y que si dejaba de sentir todo eso, ese día todo lo demás también se acabaría. No entendía la diferencia, no entendía en la práctica todo lo que sabía en teoría. Pero el tiempo me lo ha enseñado y ahora ya lo entiendo, y es verdad, el enamoramiento con, sus pros y sus contras, con las sensaciones positivas y las negativas, con las alegrías y las tristezas, es maravilloso, pero el amor, es mucho mejor, es mil veces mejor y si, es diferente, es muy diferente.

Hoy por hoy sigo enamorado de mi PP, quizá la intensidad ha bajado, pero para mi sigue siendo la persona más maravillosa del mundo, sigue siendo lo mejor que me ha pasado en la vida, sigue siendo el compañero ideal, sigue siendo la mezcla perfecta entre amigo y pareja. Pero ya puedo aceptar que tiene defectos, que no es perfecto, cosa que ya no me importa, porque lo amo, porque ya no es un simple enamoramiento, ya ha evolucionado, ya es amor, ya sé que es el amor.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

"UN MINUTO PARA LOS DERECHOS HUMANOS"
Estimados participantes:

AMBULANTE, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Cinépolis, la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, la Universidad Iberoamericana y el Grupo Interagencial para los Derechos Humanos del sistema de las Naciones Unidas les invita a escribir sus comentarios, dudas o preguntas acerca de este concurso que estamos llevando a cabo en el marco del aniversario 60 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.


El video puede ser grabado en cualquier calidad, puede ser animación documental o ficción.


www.unminutoparalosderechoshumanos.com
¡PARTICIPA!

Omar dijo...

Me encanto tu post!
Aaaa, que bonigo =)