jueves, febrero 22, 2007

Este es el día del cambio.

Y no, no estoy hablando del cambio de Lety la fea, tampoco estoy haciendo referencia al gobierno Foxista, me refiero a que hoy es el día del cambio de actitud. Y no es que haya sido de la noche a la mañana, de hecho hace mucho que se venía fraguando en mi interior, hace mucho que crecía dentro de mi como una úlcera, como un hernia; lo único que necesitaba era un empujoncito, algo que encendiera la mecha.

Y es que sí aprendo, a veces necesito un zape, o una sacudida pero de que aprendo, aprendo, y después de lo que pasó ayer lo decidí, decidí que ni una vez más, que a partir de hoy todo va a cambiar, y aunque reconozco que soy medio desidioso y que no es la primera vez que digo esto, esta vez es diferente, porque esta vez lo siento, esta vez es real, esta vez estoy decidido y yo decidido soy como una cabra, soy como una de esas cabras salvajes que se proponen subir la montaña y que no se detienen hasta conseguirlo.

Y es que es cierto, le di un lugar que no le correspondía, le di una responsabilidad que no era suya, lo convertí en el centro de mi universo, en el motor de mi vida, todo lo que hago, lo hago en función suya, y tiene razón, no tenemos porque estar pegados todo el tiempo, y tiene razón, no es su culpa que no cumpla con mis expectativas, que no actúe como yo deseo que lo haga, no es su culpa, nada es su culpa.

No es momento para flagelarme y hundirme en la autocompasión, es momento de actuar, es momento de cambiar mi comportamiento y empezar por fin a vivir, a vivir mi vida por mi y para mi, es momento de dejar de andar buscando muletas para poder seguir caminando, cuando no las necesito pues lo único que me impide caminar es el miedo, es momento de empezar a hacer las cosas que quiero hacer por mi y para mi, es momento de volver a pensar en mi, es momento de volverme a dar el lugar que me corresponde, yo soy el centro de mi universo, yo soy el motor de mi vida, yo soy mi vida. El, él es sólo una parte, una parte importante pero una parte a final de cuentas, él tiene un lugar en mi vida pero no es mi vida, y no es justo que lo haga responsable de ella, no es justo para él, como tampoco lo es para mi.

Por eso hoy es el día del cambio, y no lo digo por venganza, aunque al principio si lo pensé, al momento del enojo si pensé, “ok, pues si eso es lo que quieres, eso tendrás”, pero la noche transcurrió, la almohada me dio su consejo, y ahora, ahora que ya estoy más tranquilo me doy cuenta de que en verdad es esto lo que quiero hacer, que en verdad quiero arriesgarme, que en verdad quiero vivir por mi y dejar de ser una sombra, una sombra sin dueño.

Es por eso que hoy es el día del cambio, y es que yo soy como los autos, y no como un vochito cualquiera, necesito estar lo suficientemente acelerado para cambiar de velocidad, porque si lo intento antes, la velocidad simplemente no entra. Y no, no es que esté armando un plan malévolo de esos que me salen tan bien, no es que esté enojado y busque quien me la pague, todo lo contrario, por eso es que esta vez todo es diferente, porque me siento tranquilo, me siento de buen ánimo y sé que todo será para bien.

1 comentario:

Craving Oxygen dijo...

Hola... es bueno un cambio de actitud y que mejor conciente y bien dirigido y mentalizado te mando un abrazote... eso de que leiste mi blog me sorprendio jejeje creo que conoces parte de mi vida que bueno a veces hasta yo quisiera olvidar jejeje
te mando un abrazote fuerte fuerte
y nos estamos leyendo, cuando te des una vuelta al df no dudes en buscarme =)